

PEDRO ANDRADES
Esta postal es fácil encontrarla en los rincones más turísticos de Andalucía. La he visto en Sevilla, Granada o Ronda, y se repite entre un ramillete de imágenes de lorcas, rincones del Albaicín o bailaoras de una Andalucía rural y tópica que entusiasma a los turistas extranjeros. La instantánea, extraordinaria, debe circular por medio mundo sin que nadie conozca el lugar fotografiado, dado que no está localizado en la postal. La hizo el prestigioso fotógrafo Javier Andrada y, aunque no lo parezca, es en color. «Me aposté en la albarraílla. Hice una serie de cuatro fotos mientras esa mujer subía», nos cuenta. Esa anciana es Juana López, mi bisabuela materna. La historia de esta foto nos la recuerda el propio autor tomando café junto a la muralla de la Macarena de Sevilla. Andrada tiene una trayectoria impresionante. Ha retratado la vida en Marruecos, El Cairo, La Habana, Chiapas, El Orinoco, Las Galápagos (donde anda enfrascado ahora la mitad del año en un proyecto apasionante) y… Andalucía. Su mirada del paisaje y su aproximación antropológica a los andaluces ha quedado reflejada en numerosos libros y exposiciones con un sello de calidad muy identificable.

A Setenil le llevó de rebote su afición a la naturaleza y la espeleología, cuando un amigo hacía un documental sobre el buitre leonado en la sierra gaditana. «Me sorprendió mucho Setenil», dice. Calcula que esa foto debe tener unos 35 años. Hizo otras, como la que acompañamos y que no hemos conseguido identificar, para lo que pedimos colaboración. Las dos las publicó Gráficas Siete Revueltas y las heredó «Ediciones Asangre» para su colección de «Detalles andaluces», que incorpora una tercera imagen de una de las subidas al Carro, de otro autor. La de la calle Herrería ha sido un éxito indiscutible. Estaría bien invitar a Javier Andrada a exponer en el pueblo y retratar, 35 años después, los mismos lugares que ha fijado en la memoria de tantos turistas.

Espero no estar confundido, pero hay otra foto parecida al contrario, hecha desde abajo y con otra mujer que esta bajando. Pues bien a lo que iba, allá por el año 96, en una feria de muestras en Marbella vi una de las dos fotos en un folleto y le otorgaban la foto a una calle de Grazalema o Zahara de la Sierra ya no lo recuerdo bien. Lo cierto y seguro, es que de alguna forma u otra se estaban aprovechando esa foto y explotandola para el turismo.
La primera vez que vi esta imagen fue en una postal en una tienda del barrio de Santa Cruz en Sevilla. Creía haber descubierto la imagen más entrañable y hermosa de Andalucía. De pronto me percaté de que había subido muchas veces por esta calle de piedra y sombra para visitar a una señora estupenda, setenileña y abuela encantadora. Y me sentí reconfortada y feliz.
Jacky